;xSTx;img src="https://www.hogardecristo.cl/reporteanual2019/contenidos-bitacora/imagenes/intro.jpg";xETx;;xNLx;;xNLx;;xSTx;p align="justify";xETx;Una bitácora en el sentido original de la palabra es un término náutico y se refiere a un cajón al lado del timón de un barco donde se guarda la brújula. Una bonita imagen para lo que terminó convirtiéndose en el sustantivo para designar el relato cronológico de lo que sucede en una travesía, especialmente cuando el navegar es tormentoso y hay que tomar acciones y tener registro detallado de lo acontecido y lo decidido para afrontar la tempestad. ;xSTx;/p;xETx;;xNLx;;xNLx;;xSTx;p align="justify";xETx;La pandemia sanitaria con sus desastrosas consecuencias económicas y sociales ha sido, sin duda, una tormenta inesperada y brutal, de dimensiones gigantescas, cuyos efectos según todos los expertos nos han hecho retroceder 30 años en términos de pobreza y progreso social. ;xSTx;/p;xETx;;xNLx;;xNLx;;xSTx;p align="justify";xETx;Con fecha 7 de marzo de 2020 se publicó en el Diario Oficial el decreto mediante el cual el Ministerio de Salud de Chile declaró la emergencia “por brote del nuevo coronavirus (SARS-CoV-2)”. Diez días después, el 17 de marzo, el Hogar de Cristo, dado que Chile ya se encuentra en la fase 4, en que “se hace muy complejo rastrear las fuentes de contagio”, decidió tomar medidas en su operación general y en sus 144 programas sociales, acogiendo las indicaciones del Gobierno y las prácticas que habían resultado efectivas en el mundo para ralentizar y minimizar los contagios. Ese día, se decide suspender las clases y programas socioeducativos de fundación Súmate por 14 días, lo mismo que en los jardines infantiles y salas cuna. Sin embargo, en ambos casos, colegios de Súmate y los jardines y salas cuna se mantienen abiertos para ofrecer atención a los jóvenes y párvulos y lactantes que lo requieran. También se suspenden las visitas a las residencias infanto-adolescentes y se aplica cuarentena preventiva a los residentes, lo mismo sucede en las Residencias de Adulto Mayor, Centros de Atención Residencial y Casas de Acogida. Ese mismo día se dispone que los trabajadores de soporte trabajen desde sus casas, apoyando a los casi 1.500 que están ocupados de los 4.500 acogidos en residencias, hospederías y otros programas residenciales, ya que todos constituyen el grupo de mayor riesgo frente a la pandemia: adultos mayores en abandono, personas en situación de calle, hombres y mujeres con discapacidad mental.;xSTx;/p;xETx;;xNLx;;xNLx;;xSTx;p align="justify";xETx;Ese 17 de marzo de 2020, cuando el horizonte se mostraba borrascoso y el cielo encapotado anunciaba la tormenta, se empezó a escribir la bitácora de esta larga y durísima travesía, en que han faltado insumos sanitarios, respuestas de la autoridad, personal experimentado –al irse contagiando o entrando en cuarentena los equipos completos–, recursos para afrontar cada vez nuevos y complejos desafíos y pérdidas, muchas pérdidas. Lo que nunca escaseó, sin embargo, fue la responsabilidad de todos los trabajadores, socios, voluntarios del Hogar de Cristo, quienes han dado muestras de que el ideal de hacer de Chile un país más digno y justo para todos, en especial para los más pobres entre los pobres, es el puerto al que todos aspiramos a llegar. ;xSTx;/p;xETx;